domingo, 2 de agosto de 2009

Sociedad - El boom de los cruceros

Un día alguien pensó que podría crear un casino en pleno desierto y esa es la razón de que hoy exista Las Vegas. Algo parecido ha debido de pasar con la idea de los cruceros, donde se han conseguido construir auténticas ciudades flotantes donde miles de pasajeros viajan por el mar entre bares, restaurantes y todo tipo de diversiones.

Estos parques de atracciones flotantes con piscina, teatro, casino, golf, baloncesto, escalada y todo lo imaginable en una búsqueda infinita por dar al crucerista el mejor servicio tiene zona de guardería durante 16 horas al día, gimnasios, sauna y sobre todo comida.

La comida es un punto crítico de estos barcos y que han trabajado con especial cuidado, por eso se dispone de una gran variedad de restaurantes distintos en representación de los tipos de cocina del mundo, además de incluirlo en su concepto “freestyle” que viene a decir haz lo que quieras, cuando quieras. Por eso se puede comer interrumpidamente durante todo el día en buffets interminables y con una variada cantidad de platos distintos. Es el placer de comer llevada a su máxima expresión, gente comiendo a todas horas en todo lugar dejándose arrastrar por la gran gula que los gobierna.

Pero no debemos de olvidar que el crucero es una forma de viajar y en este sentido es difícil superarlo. Por ejemplo un día puede comenzar con un espectacular desayuno frente a las sorprendentes murallas de La Valleta en Malta, donde el barco ha amarado mientras dormías. Disfrutar del día paseando por esta bella ciudad y después de un poco de piscina, cenar viendo en un enorme ventanal un volcán en activo como es el Etna. Antes de dar por concluido el día disfrutar del estrecho de Mesina, donde las luces de las casas de Italia y Sicilia están tan cercanas que parecen comunicarse entre ellas.

Una idea sin lugar a dudas muy brillante, con un futuro prometedor, que asegura la construcción en los próximos años de cruceros cada vez más grandes hasta llevarlos al límite de la imaginación.

No hay comentarios: